jueves, 3 de noviembre de 2011

Tácito y expreso


Qué triste es el amor cuando te falta
qué vacío se siente no sé dónde.
(Carlos Serra)

Qué vacío se siente no sé dónde
si el amor se ha fugado entre suspiros,
qué faltos de sentido los retiros
a ese lugar que tú crees que se esconde;

Qué vana búsqueda, fatal recuerdo.
Qué insustancial pensar en un futuro.
Lo que pasó, pasó; tan solo un muro
que sin quererlo fue tácito acuerdo.

Hay lugares acá -los corazones-
para una fuente donde, renacido,
brotará un nuevo amor desconocido
restallando la pena en los rincones.

La tristeza mayor: desesperanza.
Alimentemos pues la vehemencia,
los restos de una antigua adolescencia,
razón expresa de nuestra alianza.

Idella Esteve
(3-11-11)




2 comentarios:

Carlos Serra Ramos dijo...

Otra vez contigo, Idella, para agradecerte el regalo que sin saberlo me otorgaste con este precioso poema, excelente poema, querida. ¿sabes? el día 4 fue mi santo, así que lo tomo como un obsequio. Me ha proporcionado una gran alegría ver que el mío te sirvió de inspiración, repito, una alegría que compensó un día que lo tuve un tanto triste.

Te felicito muy sinceramente por este poema tan bien hilado que se lee de maravilla y un tema de desamor que nunca se gastará porque ese doble sentimiento nos acompaña siempre y es común a todos los seres.

Te estimo mucho, querida Idella, y aunque nos relacionemos poco has de saber que te guardo un gran afecto.

Un beso con cariño, amiga mía.
..........................Carlos

Idella Esteve dijo...

Carlos, felicidades con retraso.
Es motivo de dicha para mí el haberte proporcionad algo de alegría en este día que siento que tuviera ya algo de triste.

Igualmente te estimo mucho y siento no haber podido conocerte personalmente y a tu obra pictórica ya que también soy gran aficionada a la pintura. Pero nunca se pierde la esperanza.
De momento estoy en el paro pero creo que en un año solicitaré la jubilación y podré unirme alguna vez y verte en la concentración de Gredos.

Un beso, querido amigo, y siempre gracias por tus palabras,

Isabel